Las MILFs o cougars son mujeres ya maduras con las cuales muchos hombres jóvenes se sienten atraídos sexualmente. Sigue leyendo y aprende todo sobre ellas.
Las MILFs (Moms I’d Like to Fuck) han existido desde siempre, pero gracias a la televisión y las redes sociales, se han puesto muy de moda en los últimos años. Pese a su popularidad, las chicas más jóvenes se preguntan por qué los hombres en sus veintes y treintas se mueren de deseo por estas maduritas. Te compartimos 5 razones que explican su éxito.
– Una MILF es una mujer madura, pero no vieja; sabe ser muy sensual y sexual cuando se lo propone. Por lo general, son mujeres divorciadas que están en busca de nuevas aventuras amorosas. Destacan por sus looks sexys mas nunca vulgares. Las también llamadas cougars, tienen clase, saben de moda y visten muy bien. Son atractivas a simple vista, así se roban la mirada de los hombres jóvenes que quedan hipnotizados por su sofisticación.
– Su actitud atrevida también les da muchos puntos con los hombres. No se intimidan ante nadie ni nada, ni se andan con rodeos en ningún tema. Si quieren conquistar a un chico no pierden el tiempo en coqueteos, van directo al grano porque una noche de sexo es el objetivo. El trato no podía mejor para los chicos, ya que no solo tendrán buen sexo, sino que no se olvidarán de los compromisos por completo.
– Si el hombre que atrajo a la MILF es joven, fuerte y atractivo, pero no tiene dinero, esto no es un problema porque a ella no le molesta pagar las cuentas. El joven brinda su energía, su espíritu aventurero y su estamina, mientras que ella ofrece su experiencia, sensualidad y estabilidad económica.
– Ahora, hablando desde el punto de vista sexual, las MILFs son unas lobas en la cama. Se trata de mujeres que no tienen prejuicios y su gran experiencia sexual habla por sí sola. Han logrado dominar el arte del sexo a lo largo de años de práctica, por lo que un hombre joven podrá aprender mucho de ellas.
– Las MILFs no son esas novias jóvenes y caprichosas. Estas mujeres no son ultra demandantes, no hacen escenas de celos ni espían el celular de su chico esperando descubrir alguna aventura o romance. Las relaciones con ellas son directas y prácticas, y esto puede resultarle más que un buen trato a los hombres.
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